CONCLUSIÓN
Gardner afirma que todas las personas son dueñas de cada una de las ocho clases de inteligencia , aunque cada cual destaca más en unas que en otras, no siendo ninguna de las ocho más importantes o valiosas que las demás. Generalmente, se requiere dominar gran parte de ellas para enfrentarnos a la vida, independientemente de la profesión que se ejerza. A fin de cuentas, la mayoría de trabajos precisan del uso de la mayoría de tipos de inteligencia. Personalmente me identifico con las inteligencias naturalista y cinestésica.